Un día te despiertas con la rara pero hermosa sensación de que soñaste algo que te gustó, a lo mejor algo que nunca habrías pensado. Te pasas el día pensando en dicho sueño, y regeneras los recuerdos nublosos de forma que con el tiempo mejora. Tan bueno es que pasa de sueño nocturno a deseo. Y cambias de opinión y piensas: "Esta noche se me ha rebelado mi alma y me ha dicho lo que amo". Y cambia.
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